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RODA I
Fruta negra en un vino con carácter que mantiene la frescura de la fruta.
Roda I está ensamblado por los pagos que ese año han madurado con la sensación de fruta negra. La fruta negra, honda, casi siempre dominada por la ciruela, acompañada de notas minerales, chocolate, sensaciones balsámicas, forman un todo que va fluyendo lentamente desde lo más profundo de la copa hasta hacerse enorme al entrar en la nariz que lo espera. En boca, el volumen se hace patente, la complejidad frutal envuelve suavemente el espacio bucal notándose los taninos abundantes y fundidos. El vino se alarga marcando el recuerdo por vía retronasal cada vez que se respira. Perdura una sensación de fruta y de frescura que invita a continuar bebiéndolo.
Añadas RODA I 2004
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AÑADA CLIMATOLÓGICA

Fue una cosecha excelente, un año muy seco y de absoluta sanidad. Hubo una ligera helada en el mes de abril que reguló la cantidad de uva. Llovieron 410 mm durante el ciclo vitícola. Una lluvia del mes de septiembre alivió la sequía y redondeó una añada para el recuerdo.

Añada austera en la que la viña tuvo que sufrir para arrancar del suelo cada detalle, pero esa necesidad y esfuerzo han hecho que queden grabados para siempre en el vino.

INFORMACIÓN TÉCNICA

Variedades:

83% Tempranillo, 17% Garnacha.


Vendimia:

1-25 Octubre.


Elaboración:

Fermentación en tinas de roble, con temperatura controlada.


Crianza:

En barricas de roble francés; 1/3 nuevas, 1/3 de dos años y 1/3 de más de cuatro años. 24 meses en barrica y 12 meses en botella.


Estabilización:

Por métodos naturales; clarificación con clara de huevo, sin filtrado. Debido a este proceso pueden aparecer precipitados.


Alcohol:

13.5% Vol.

CATA

Color:

Capa alta con ribete rojo y fondo rojo oscuro. Sorprendentemente joven para la añada, parece un vino de la década del 2000.


Nariz:

Muy intensa y al mismo tiempo profunda de carácter muy negro con notas de ciruela negra, cacao y tierra, con gran carácter mineral y detalles de hojas de tabaco y especias dulces. Vino muy serio con una nariz muy importante.


Boca:

Voluminoso, potente, llena la boca de forma impactante, con fruta negra muy viva, todavía está muy joven. Aparecen la ciruela y el cacao con mucha frescura. Es un vino enorme.

El postgusto es larguísimo. Todavía tiene cierta austeridad pero gran nobleza.

Es un vino que vivirá muchas décadas más.




Cata realizada en Haro el 29 de Marzo de 2017

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